Las preocupaciones frente a una nueva temporada de sequía

Los 26 milímetros de agua caída en abril no fueron suficientes para revertir el déficit de precipitaciones acumuladas en la zona central. Si bien a comienzos de año se esperaba que las lluvias llegaran a partir de mayo, en el boletín Agroclimático de abril de 2022, de la Dirección Meteorológica de Chile, se indica que La Niña se mantendrá hasta julio con una probabilidad de 61%. Aún más, se teme que el fenómeno se mantenga durante todo el año.

En un artículo publicado en la Revista del Campo de El Mercurio, Diego Campos, meteorólogo de la Oficina de Servicios Climáticos de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), señala que “eso significa que, principalmente la zona central, tendrá una mayor probabilidad de registrar menos lluvia de lo normal”.

En el mismo medio, el presidente de la Junta de Vigilancia del río Maipo, Luis Baertl, comentó las preocupaciones del sector agrícola frente a un nuevo invierno seco: “Si no llueve durante el invierno, no se llenará el Embalse El Yeso, por lo que vamos a tener una mala partida y en verano no vamos a tener agua, porque vamos a estar mucho más restringidos que este año”.

De hecho, el 78% de los embalses del país tienen menos de un tercio de su capacidad. En el caso del Embalse el Yeso, a abril de este año, el déficit alcanzó el 55%, con 27,4 milímetros de precipitaciones acumulados a la fecha, según el informe hidrometereológico de la Dirección General de Aguas.

 

Fuente: Revista del Campo

Ante la menor disponibilidad de agua, una de las medidas más efectivas es la eficiencia en el uso del recurso. No solo al instalar riego tecnificado o hacer pozos, si no también vigilando y entendiendo el comportamiento de plantas y suelo, utilizando sensores, tecnología y nuevos conocimientos.

Los expertos recomiendan planificar y manejar esta temporada observando “el desarrollo de los pronósticos de temperatura a nivel local. Además de monitorear la humedad de suelos desde la siembra o trasplantes y hacer seguimiento al desarrollo de los cultivos, para planificar a tiempo los manejos, fertilizaciones e incluso las cosechas”.

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